El miércoles se estrenaba en la 19º edición del Festival de Cine de Málaga el documental de la vida de Malú, ‘Malú: ni un paso atrás’, producido por Curro Sánchez Varela y Telmo Iragorri.
Después de 18 años de carrera, 13 discos publicados, infinidad de premios y reconocida como una de las mejores voces femeninas de España, Malú llegaba a Málaga para presentar su historia profesional, pero también personal.
El documental ha conseguido que los 10 meses de trabajo se hayan visto reflejados en el resultado final. La narración del mismo es excepcional, utilizando el orden de su discografía para ir adentrándonos en las historias, anécdotas, sensaciones y problemas que trajeron cada uno de sus trabajos.
A través de ello, hemos descubierto a una Malú distinta, pero más a fondo, algo que estábamos seguros de haberlo hecho ya tras tantos años presente en la escena musical de nuestro país, pero con este documental descubrimos que no. Había mucha Malú por conocer aún.
Conocemos a una Malú traviesa de niña, descubrimos que no fue fácil su salto al mundo de la música y nos hace partícipes de sus miedos en aquellos momentos en los que el trabajo la obligaban a mantenerse lejos de su casa y su familia sin haber cumplido aún la mayoría de edad. Pero, a la vez, descubrimos cómo el paso de los años le permitió convertir ese miedo en un sueño, en una meta.
Nos acercamos a una Malú con coraje desde sus primeros pasos de niña, valiente y, sobre todo, trabajadora incansable. Si hay algo que nos deja claro este documental es que cualquier cosa a la que se hubiera dedicado Malú que no fuera la música, habría sido un error absoluto.
Vivimos cómo prepara la música, la letra, las canciones de cada disco. Cómo se entrega con el montaje, idea y preparación de la escenografía de cada tour, de cada concierto. “Detrás de todo lo que hay siempre está ella”, decía uno de los miembros del equipo de la cantante. Equipo al que también conocemos en este documental.
Esta pieza biográfica hubiera sido imposible o no hubiese conseguido el sobresaliente de no haber sido por una Malú que se abre en canal, que relata sus sentimientos y sensaciones en cada época de su vida por la que discurre el documental, acercándonos a momentos difíciles como, por ejemplo, la cancelación de su gira por problemas de salud. Pero, también nos descubre la Malú amante de los animales, la divertida, la familiar, la amiga y, especialmente, la Malú que despertó a la vida tras la dura etapa que supuso su operación de vesícula. O, incluso descubriéndonos los problemas con discográfica o productor de alguno de sus discos.
Pero, también habría sido imposible sin las imprescindibles intervenciones de sus padres, hermano y amigos que se van intercalando a lo largo de todo el documental. Entrevistas a las personas claves y declaraciones necesarias para la historia, todo cuidado al detalle.
El resultado es una joya y más lo será para todos aquellos que la siguen desde sus comienzos o los que se unieron más tarde al brutal fenómeno que mueve esta bestia musical. ‘Malú: ni un paso atrás’ se podrá visionar en cada ciudad por la que pase el Tour “Caos”.
El documental es imprescindible para saber que nada es imposible, que el trabajo es imprescindible para conseguir tus sueños, pero sobre todo, es importante no olvidarse que el motor de todo es vivir.